Quedamos a las 11 con Manuel, un guía de Canero, Luarca.

Lamentablemente durante el día de hoy la madre naturaleza no estaba de nuestro lado. No pudimos bucear porque el mar estaba en muy malas condiciones, con olas llegando incluso a 1,8m.

Al mar tiempo, buena cara. Por eso emprendimos nuestra ruta a pie de dos horas y en este caso la ruta sí que fue preciosa. 

Contemplamos unas vistas espectaculares, pasando por la playa de la Cueva y las playas de los Molinos. Nuestra travesía estuvo repleta de fascinantes acantilados y cortes en las laderas de los montes que mueren en el mar Cantábrico. 

Tuvimos que cambiar totalmente la etapa 17 por motivos estratégicos. Gracias a ello, descubrimos una nueva ruta fabulosa. Marchamos sorprendidos y satisfechos de descubrir estas tierras asturianas.